Ayuda a Cristianos Perseguidos

Eritrea es a menudo llamada la «Corea del Norte de África», una nación donde sólo tres ramas del Cristianismo están legalmente reconocidas: la ortodoxa eritrea, la luterana y la católica romana. Cualquiera que siga a Jesús fuera de estas ramas de la iglesia aprobadas por el Estado se convierte en parte de la Iglesia clandestina-y se arriesga a una persecución severa, que incluye violencia, privaciones injustas y encarcelamiento indefinido.

En 2019, el pastor Yohan fue arrancado violentamente de su esposa e hijos. ¿Su «delito»? Predicar la Palabra de Dios y compartir el amor de Jesús. Las autoridades le dijeron que pasaría los próximos años de su vida en prisión pagando por este delito.

Tortura. Silencio por inanición.

Durante los tres años siguientes, el pastor Yohan soportó sufrimientos inimaginables: palizas, hambre y trabajos forzados. Sus manos se ampollaban y sangraban. Sus miembros palpitaban constantemente. Una comida diaria de gachas de lentejas aguadas le dejaba un dolor de estómago permanente. Las duras condiciones de la vida en prisión fueron un golpe para su espíritu apacible. Pero con el tiempo, la tortura, el hambre y el frío se convirtieron en rutina.

Lo que nunca se convirtió en rutina fue la inanición espiritual: la ausencia de la Palabra de Dios.

“La cárcel era muy dura. A veces el techo tenía goteras. El suelo estaba embarrado y dormíamos allí. No había comida. Pero aprendes a no quejarte. Con el tiempo, todo se vuelve normal.

Lo que nunca se convierte en normal es que te nieguen la Palabra de Dios”.

Más de 1.000 biblias sonoras, ¡y contando!

Gracias a las oraciones y al apoyo de personas como tú, nuestro equipo DOHI ha distribuido más de 1.100 audio Biblias alimentadas por energía solar a cristianos perseguidos como el pastor Yohan. Estas preciosas herramientas son a menudo la única fuente de las Escrituras disponible en las cárceles y en las remotas iglesias domésticas de Eritrea.

En estos momentos, se calcula que unos 3.000 creyentes están encarcelados en Eritrea, soportando un sufrimiento interminable sin acceso a la Biblia. Otros miles viven escondidos o refugiados en el país vecino Etiopía.

Además, muchos otros se reúnen en secreto en iglesias clandestinas, desesperados por la Palabra de Dios.

Cada año, equipamos a pastores de primera línea como Yohan con Biblias de audio para que las distribuyan entre los cristianos perseguidos y las iglesias clandestinas. También proporcionamos alimentos, ropa y ayuda de emergencia a familias que sufren a causa de su fe.

Da esperanza. Regala la Palabra de Dios.

Únete a nosotros para llevar luz a uno de los lugares más oscuros de la tierra. Con tu ayuda, podemos poner la Palabra de Dios en manos de quienes lo han arriesgado todo para seguirle.

¿Les apoyarás hoy?